¿Pueden coexistir el césped tradicional y el césped seco?

A menudo sucede que quien quiere dar nueva vida a su espacio verde con un césped alternativo no quiere renunciar a elementos que ya están presentes en el jardín, como la alfombra de césped de un césped inglés. Si no quieres optar por una reconversión completa de tu césped con nuevas variedades con bajos requerimientos hídricos, es posible imaginar la convivencia, dentro de un mismo espacio, de las dos formas de jardinería. ¿Cómo podemos entender, sin embargo, si el césped tradicional preexistente puede coexistir con un nuevo césped seco? La respuesta no es sencilla y, sobre todo, no es única: cada jardín tiene su propia historia, pero es posible encontrar algunas respuestas en nuestra experiencia y en los experimentos realizados junto con nuestros clientes.

  • Las ventajas de un césped seco
  • Cómo integrar césped tradicional y césped seco
  • Riego y mantenimiento del césped mixto.
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    Las ventajas de un césped seco

    Empecemos por lo básico, analizando la estructura y necesidades de un césped seco, para entender su compatibilidad con un césped tradicional.

    Los céspedes con bajos requerimientos hídricos se componen de variedades particulares de cobertura del suelo que resisten muy bien la sequía, sin necesidad de demasiado riego artificial durante todo el año. Se trata, por tanto, de variedades sumamente útiles para quienes desean un césped que sea casi autosuficiente, requiera muy poco mantenimiento y garantice un gran ahorro de agua: nuestros céspedes alternativos requieren alrededor de un 80% menos de agua, en comparación con la necesaria para un césped tradicional inglés.

    Las altas temperaturas que estamos experimentando estos últimos años en nuestra zona, por tanto, no son un problema para estos plantones súper resistentes, que sobreviven muy bien incluso a largos periodos de sequía, sin secarse ni dañarse. Estas características, que permiten tener un jardín exuberante incluso sin riego, son a menudo también los puntos débiles de los céspedes tradicionales, que requieren condiciones muy diferentes, numerosos riegos y cortes más frecuentes para permanecer verdes, florecientes y limpios. ¿Cómo es posible hacer coexistir necesidades de mantenimiento tan diferentes? La respuesta está en el compromiso.

    Cómo integrar césped tradicional y césped seco

    Las integraciones de nuestros céspedes alternativos con otras especies de césped son posibles, pero impredecibles. En estos casos, al tratarse de la mayoría de céspedes mixtos formados por diferentes variedades, entran en juego distintos factores que no siempre se pueden predecir.

    Por los resultados de muchos de nuestros clientes y por la experiencia adquirida en el diseño de jardines, sabemos que los resultados de estos experimentos a veces han resultado ser muy buenos y otras no tan buenos. Por este motivo, nuestro primer consejo es siempre realizar pruebas previas antes de decidir cómo integrar las diferentes variedades.

    En cuanto a elegir la combinación adecuada de céspedes alternativos, para lo cual siempre es mejor realizar pruebas de establecimiento, también en este caso recomendamos seleccionar una pequeña porción de su terreno para probar la integración del césped tradicional preexistente con nuevas diferentes variedades de césped seco, para comprobar el resultado final antes de proceder con el resto de la superficie.

    Las variedades que más fácilmente pueden adaptarse a las condiciones de un jardín mixto son Lippia nodoflora y Verbena hybrida, ya que son más agresivas que las demás, y Achillea crithmifolia, especialmente en zonas con un clima más duro. Las otras variedades de césped alternativo tienen un crecimiento más discreto y por tanto tienen menos posibilidades de sobrevivir en un césped ya colonizado por otras especies.

    Riego y mantenimiento del césped mixto.

    Para que el uso de variedades con bajos requerimientos hídricos cumpla su propósito ecológico y de ahorro de recursos, es fundamental seguir las instrucciones para el riego del césped en seco.

    El régimen de riego es fundamental porque es el que permite que las plántulas desarrollen sus raíces lo suficientemente profundas como para encontrar en el suelo los recursos hídricos que necesitan, sobreviviendo incluso a los periodos más largos de sequía. Los riegos, por tanto, deben ser abundantes pero esporádicos, simulando aguaceros esporádicos. Con esta técnica, las plantas preexistentes tenderán a ser reemplazadas por nuevas plántulas. Inicialmente, por tanto, convivirán el césped tradicional y el seco, pero al cabo de unas temporadas prevalecerán las variedades más resistentes.

    Las nuestras son indicaciones generales a las que, sin embargo, siempre hay que sumar las variables de cada situación. En estos casos, sin embargo, no hay una respuesta única, ya que cada jardín tiene sus propias condiciones climáticas, exposición al sol y calidad del suelo a considerar. Sólo una cuidadosa selección y pruebas en profundidad nos permiten encontrar la combinación ideal para integrar de la forma más funcional posible un césped tradicional con variedades con bajos requerimientos hídricos.